Tolerancia cero ante las actitudes machistas

La UAB trabajó de forma participativa con representantes de todos los colectivos de la comunidad a lo largo del año 2022 en un proceso de revisión y modificación de su Protocolo para prevenir y actuar contra el acoso sexual, el acoso por razón de sexo, orientación sexual, identidad de género o expresión de género, y la violencia machista (aprobado en 2016) con la finalidad de mejorar los procesos, circuitos y actuaciones e introducir conceptos como violencia digital, vulneración de derechos sexuales, violencia vicaria, violencia de segundo orden o violencia económica, entre otros.

Esta actualización del Protocolo de la UAB fue aprobada por el Consejo de Gobierno de la UAB el pasado 14 de diciembre. Los cambios en los procedimientos quieren agilizar el proceso y garantizar su eficiencia evitando la revictimización, poniendo énfasis en el acompañamiento de las víctimas así como en los mecanismos de reparación.

Este protocolo tiene como finalidades prevenir la aparición de conductas de acoso por razón de sexo entre los miembros de la comunidad universitaria, establecer unas pautas de actuación ante una denuncia y adoptar las medidas preventivas y correctoras adecuadas, además de ofrecer apoyo y acompañamiento a las personas afectadas (independientemente de que la persona afectada opte por otras vías administrativas o judiciales).

Un protocolo que da resultados

El Protocolo establece el procedimiento de actuación en caso de denuncia de la persona afectada o de cualquier persona de la comunidad universitaria -personas trabajadoras o estudiantes- que haya tenido conocimiento directo o indirecto de los hechos que motivan la denuncia. A partir de ese momento, la Comisión Técnica Asesora (CTA) es la encargada de aplicar todo el procedimiento de actuación técnica y especializada que recoge el Protocolo.

Concretamente, en los dos últimos años (2021-2022) ha habido ocho solicitudes de activación del Protocolo. De éstas, siete son por denuncias de mujeres hacia profesores varones, mientras que una hacía referencia a una denuncia de homofobia entre alumnado masculino.

En los casos de denuncias a profesores se abrieron expedientes disciplinarios por investigar los hechos y sancionarlos. Uno de los casos se resolvió con una suspensión de empleo y sueldo para un período de dos años y medio y apercibimiento y otro con dos años de suspensión de empleo y sueldo. Aunque corresponde a un caso iniciado en 2022, cabe añadir también un tercer expediente disciplinario a un profesor que se ha resuelto este año con una sanción de un año y dos meses de suspensión de empleo y sueldo.

Además de estos expedientes disciplinarios, que se inician posteriormente en el informe de la CTA, en este período se abrió un expediente disciplinario a un profesor, sin que hubiera solicitud previa de activación del Protocolo, dada la gravedad de los hechos. Este caso se resolvió con una suspensión de empleo y sueldo para un período de tres años y apercibimiento.

Estas actuaciones ponen de manifiesto la apuesta decidida del actual Equipo de Gobierno por transparentar y actuar con firmeza ante cualquier actitud o conducta que pueda constituir un caso de machismo y trabajar de forma transversal para garantizar una universidad libre de violencias contra las mujeres.

Informes sobre la aplicación del protocolo presentados por el Observatorio para la Igualdad:

- 2021: https://www.uab.cat/doc/Informe_Observatori_Igualtat_2021_2

- 2022: https://www.uab.cat/doc/Informe_anual_observatori_igualtat_2022