Procedimientos experimentales

Administración de sustancias

En aquellos procedimientos que implican la administración de fármacos o de otras sustancias se deben tener en consideración los siguientes aspectos básicos:
 

Naturaleza del fármaco o sustancia a administrar:

  • Previamente a la realización del procedimiento, se deben considerar los posibles efectos tóxicos o nocivos que pueden ocurrir como consecuencia de la administración. Si, por la información disponible, se pueden prever efectos de este tipo, ya sean a nivel sistémico o local, será necesario definir en el formulario del correspondiendo procedimiento una supervisión específica con el fin de detectar la aparición de estos efectos y las posibles medidas correctoras a aplicar en los animales afectados.

Vía de administración

  • Enteral (básicamente oral).
    • Ingesta mediante la comida o el agua de bebida. Es el método más sencillo pero hará falta tener en cuenta la capacidad que dará el diseño establecido para determinar la cantidad de sustancia ingerida y si eso puede influir o no en los resultados (por ejemplo en sustancias administradas en el agua de bebida en animales estabulados en grupos). No será posible este tipo de administración para sustancias que irriten la pared gástrica.
    • Con el fin de favorecer la predisposición del animal a la ingesta oral puede ser útil hacer más atractiva al paladar la sustancia a ingerir, por ejemplo diluyéndola en gelatina o dulcificando la solución.
    • En algunos casos es recomendable la utilización de tubos gástricos (0,8 mm de diámetro externo para ratones y 1-2 mm para ratas) o una aguja curva para dosificar en animales pequeños.
       
  • Parenteral. Cuando se realiza una administración de este tipo se deben tener en cuenta unos aspectos básicos: las agujas tienen que ser limpias, puntiagudas y estériles, de una medida y grueso apropiados según el animal, la vía, el lugar de administración y la viscosidad del fluido. No se deben superar nunca los volúmenes máximos recomendados ni la velocidad de inyección del bolo. Para inyectar grandes volúmenes hará falta repartirlo en varias administraciones en lugares diferentes. Cuando el pH sea demasiado alto (>8) o demasiado bajo (<4,5) será necesario diluirlo en solución salina para evitar efectos irritantes. La solución a administrar tendrá que estar atemperada (temperatura ambiente o corporal) para evitar el dolor producido al inyectar sustancias frías. Hay que limpiar la piel con una solución desinfectante (povidona yodada o clorhexidina) para evitar infecciones, pero no de forma excesiva con el fin de no producir ninguna irritación o eliminación de flora bacteriana. Las recomendaciones para las administraciones intracerebrales se describen en el apartado dedicado a la estereotaxia.
  • Las principales vías son:
    • intradérmica (i.d).
    • subcutánea (s.c): es la más sencilla y tolerada. Permite administrar volúmenes relativamente grandes, pero las sustancias se absorben de forma relativamente lenta.
    • intramuscular (i.m): hay que aspirar antes de inyectar con el fin de comprobar que no fluye sangre por la aguja (si es así habrá que inyectar en otro punto). No permite un volumen muy grande, por lo tanto en muchos casos hará falta inyectar en diferentes puntos o buscar una vía alternativa.
    • intraperitoneal (i.p): muy habitual en roedores en los que el acceso i.v o i.m es difícil o inadecuado. Se tiene que ir con cuidado con el fin de evitar lesiones derivadas de la inyección (peritonitis, lesión hepática...). En caso de administraciones repetidas hay que alternar en cada pinchazo el flanco donde se realiza la administración.
    • intravenosa (i.v): los fármacos producen efectos rápidos y potentes y permite inyectar grandes volúmenes y bajas dosis, así como administrar sustancias con un pH o una osmolaridad bastante desviados de los fisiológicos. Para administraciones repetidas y próximas en el tiempo hay que fijar un catéter, el cual se debe supervisar periódicamente para mantenerlo en condiciones óptimas.
  • Tópica e inhalatoria
    • En la administración tópica (normalmente utilizada para ejercer una acción local), la superficie sobre la que se aplica la sustancia (solución o crema) debe estar convenientemente rasurada. En algunos casos puede ser útil la aplicación de cremas depilatorias. En función del tipo de animal hay que considerar medidas de restricción física adecuadas.
    • Se debe vigilar la posible irritación de la piel o mucosas.
    • La vía inhalatoria requiere de mascarillas o vaporizadores adaptados a cada especie animal para controlar una correcta dosificación.

Volúmenes y lugares aconsejados según la vía a administrar y la especie animal

Tabla vólumenes y lugares

 

Extracción de sangre

A continuación se detallan unas recomendaciones para procedimientos que impliquen extracción de sangre, así como una tabla con los volúmenes de sangre y lugares habituales de pinchazo según las especias.

 

Volúmenes hasta 0,1 (2-4 gotas)

  • Inmovilizar correctamente el animal.
  • No utilizar anestesia inyectable. La anestesia inhalatoria puede influir sobre los parámetros bioquímicos sanguíneos. Considerar la aplicación de crema anestésica.
  • Rasurar y desinfectar el lugar del pinchazo.
  • Es más aconsejable utilizar una lanceta estéril que un bisturí.
  • Una vez realizada la extracción, hay que presionar el lugar del pinchazo durante unos 30 segundos.
  • Controlar posibles efectos adversos durante los posteriores 30 minutos. En caso de observarse algún efecto será necesario avisar al veterinario del centro.


Volúmenes superiores a 0,1 ml

  • Como norma general, en animales sanos y bien nutridos, el volumen máximo a extraer en una extracción única no tendría que superar el 10 % del volumen de sangre circulante.
  • En extracciones seriadas es importante tener en cuenta el volumen de sangre a extraer en cada punción, el número de muestras y los intervalos que transcurren entre las diferentes extracciones. Dependiendo de la frecuencia y volumen de las muestras requeridas hace falta que el investigador considere esmeradamente la conveniencia de utilizar una aguja de mariposa o una cánula percutánea fijada con cinta adhesiva.
  • Se aconseja introducir previamente al animal en una caja termostática (30 ºC) con el fin de favorecer la dilatación de las venas. En caso de extracción por la vena de la cola se puede introducir la cola en un baño termostatado (45 ºC). Nunca se deben utilizar agentes irritantes que debido a sus efectos producen dilatación de las venas.
  • Inmovilizar correctamente el animal.
  • No utilizar anestesia inyectable. La anestesia inhalatoria puede influir sobre los parámetros bioquímicos sanguíneos. Las cremas anestésicas parecen ser bastante beneficiosas aplicadas 30-60 minutos antes de la extracción.
  • Rasurar y desinfectar el lugar de los pinchazos con el fin de evitar infecciones, contaminar la muestra y favorecer la localización de la vena.
  • Los tamaños de las agujas oscilan entre los 15-50 mm de longitud y 14-26 G de diámetro, dependiendo del diámetro de la vena y del volumen de sangre requerido. En este sentido, es aconsejable la administración de anestesia local (s.c o tópica) durante la inserción de agujas de 14 a 18 G.
  • Hay que escoger un lugar adecuado de punción (ver tabla) y extraer la sangre a una velocidad adecuada para evitar el colapso venoso.
    Una vez realizada la extracción se debe presionar el lugar del pinchazo durante unos 30-60 segundos.
  • Observación durante 30 segundos para detectar hemorragias. Control de posibles efectos adversos durante los posteriores 30 minutos. En caso de observarse algún efecto se debe avisar al veterinario del centro.
  • En caso de posteriores extracciones hay que alternar el lugar del pinchazo.

 Volúmenes y extracción de sangre

Su puede encontrar más información y vídeos de interés en este ámbito en https://www.nc3rs.org.uk/3rs-resources

Procedimientos in vitro

Se entiende por procedimientos in vitro aquellos en los que la única manipulación de los animales es su sacrificio mediante métodos eutanásicos humanitarios.

A la hora de realizar un procedimiento de este tipo hay que tener en cuenta las siguientes consideraciones:

  • Hay que definir en el formulario del procedimiento correspondiente el número total de animales previsto, aunque sea de forma aproximada, según criterios científicos, ya sean estadísticos, bibliográficos o estimaciones en base a la cantidad del material biológico que se puede obtener de un animal.
  • El método eutanásico tendrá que ser el más aconsejado según las recomendaciones para la eutanasia de los animales de experimentación de FELASA, documento publicado en Laboratory Animals (1996) Vol. 30(4): 293-316 (ver Agentes y métodos de eutanasia).
  • En caso de escoger un método eutanásico que no sea de las primeras opciones, como por ejemplo la decapitación, será necesario justificarlo mediante criterios científicos en el formulario del correspondiente procedimiento.
  • En caso de que la decapitación sea la opción más adecuada con el fin de obtener resultados válidos, y así esté justificado, hay que tener en cuenta las siguientes recomendaciones
    • El personal que realizará el procedimiento debe tener un entrenamiento adecuado en la técnica de decapitación.
    • Se debe tener cuidado con el fin de que todo el material esté perfectamente limpio y en óptimas condiciones.
    • Utilizar un método de restricción física, por ejemplo un decapicone, y un proceso de habituación de los animales a la manipulación de estos durante el procedimiento.
  • El uso del éter como agente químico eutanásico no está permitido en ningún caso.


Tumores en roedores


Todos los procedimientos en los que se induzcan neoplasias de forma experimental tienen que definir los criterios de punto final (end points), el conjunto de condiciones bajo las cuales los animales afectados serán eutanasiados. Algunos de estos criterios generales son:

  • Que el peso del tumor fuera superior al 10 % del peso del animal. Dado que en algunos casos, por ejemplo según la forma del tumor, es difícil calcular su peso, es necesario definir en el formulario del correspondiente procedimiento cómo se monitorizará el peso del tumor y qué medidas se adoptarán al excederse estos límites.
  • Que el tumor ulcerase antes de llegar a este peso.
  • En algunos estudios puede ser que, sea por el propio tumor o por el propio diseño experimental (por ejemplo procedimientos que impliquen terapia antitumoral) se produzca una pérdida acentuada de peso. En estos casos, un criterio de punto final será la pérdida de un 15-20 % de peso o bien la disminución de un 15-20 % en la ganancia de peso en animales en periodo de crecimiento.
  • Algunos tumores pueden interferir en el correcto funcionamiento de algunos órganos vitales, especialmente en los que tienen implicación con una correcta nutrición (imposibilidad de desplazarse para conseguir comida o agua, imposibilidad de deglutir...). En estos casos, si no es posible corregirlo, se debe eutanasiar al animal independientemente del peso del tumor o del animal.

Los animales con tumores inducidos tienen que ser supervisados diariamente por el personal que participa en el procedimiento.


Eutanasia

Agentes y métodos de eutanasia

Decreto 214/1997, capítulo 9, artículo 28 c). Es función de los comités éticos de experimentación animal controlar que se utilizan métodos eutanásicos humanitarios


Los criterios primordiales para la eutanasia, en términos de bienestar, son que el método no sea doloroso, alcance una rápida inconsciencia y muerte, requiera mínima inmovilización, evite la excitación, sea apropiado para la edad, la especie y la salud del animal, minimice el miedo y el estrés del animal, sea fiable, reproducible, irreversible, sencillo de administrar (si es posible en dosis bajas) y seguro para el personal. En la medida de lo posible debe ser estéticamente aceptable para el personal.

Las siguientes recomendaciones se basan en el documento publicado por FELASA en Laboratory Animals (1996) Vol. 30(4):293-316 Recomendaciones para la eutanasia de los animales de experimentación.
 

Eutanasia rodeedores

Eutanasia conejos

Eutanasia perros

Eutanasia peces

Eutanasia grandes mamiferos

Eutanasia aves

Eutanasia reptiles

Eutanasia anfibios

Análisis estadístico

Decreto 214/1997, Capítulo 9, Artículo 28 a. Es función de los comités éticos de experimentación animal informar de la posibilidad de alcanzar conclusiones válidas con el menor número posible de animales.

Servicio de Estadística Aplicada (SEA)


Puntos finales humanitarios en la experimentación animal