Presentado un protocolo para prevenir el matrimonio forzado
La Generalitat ha presentado el Protocolo para la prevención y abordaje del matrimonio forzado en Cataluña, en cuya elaboración ha participado del Grupo de Investigación CER-Migracions. El documento establece un marco de cooperación y un circuito de intervención entre las profesionales para garantizar que ninguna mujer sea víctima de este tipo de violencia machista.

“El matrimonio forzado es una forma de violencia machista, quizás de las más invisibilizadas porque afectan a varias vulnerabilidades. Uno de los aspectos clave es la toma de conciencia de la víctima y de su entorno”, ha remarcado el consejero.
Por ello, el objetivo de este nuevo protocolo es establecer un marco de cooperación y un circuito de intervención entre las diferentes profesionales para prevenir, detectar e intervenir ante situaciones de matrimonios forzados y garantizar el derecho de las mujeres a erradicar la violencia machista.
Para su elaboración se ha contado con la participación activa de profesionales de diferentes ámbitos y de entidades que desde hace años se dedican a la prevención, atención y acompañamiento de víctimas de este tipo de violencia machista. Y se ha trabajado de manera coral en el marco del grupo de trabajo para el abordaje de la Mutilación Genital Femenina y el Matrimonio Forzado, en el que participan todos los departamentos de la Generalitat implicados y que lidera la Secretaría de Igualdad, Migraciones y Ciudadanía.
Durante el acto de presentación, Sònia Parella ha explicado las pruebas piloto que se han realizado en Manresa y Santa Coloma de Gramenet durante los meses de noviembre y diciembre de 2019, que han consistido en tres sesiones de formación sobre matrimonio forzado a profesionales de diferentes ámbitos y un simulacro de su funcionamiento.
El protocolo consta de cuatro fases: prevención, detección, atención y recuperación y prevé la creación de comisiones locales y comarcales en ámbito como el educativo, de la salud, policial o de servicios sociales, entre otros. También da herramientas a los profesionales para identificar el matrimonio forzado, actuar y derivar los casos identificados y saber cómo deben actuar para su propia seguridad y protección. Todo ello con el fin de que el documento sea una herramienta de trabajo práctica y vinculada a la realidad.
Según el Departamento de Interior, entre los años 2010 y 2019 han sido atendidas en Cataluña 85 niñas y 68 mujeres (153) por haber sufrido un matrimonio forzado o haber estado en riesgo de sufrirlo, lo que ha requerido una intervención policial. Este tipo de violencia machista afecta sobre todo a niñas y jóvenes y es una práctica muy extendida en África subsahariana, Magreb y Asia Meridional.
Los casos que se han abordado en Cataluña hasta hoy son pocos, pero la vulneración tan grave de un derecho fundamental y sus consecuencias hacen necesario un trabajo de sensibilización, formación y atención que posibiliten la detección de casos de riesgo y su abordaje.
La colaboración entre el Grupo de Investigación CER-Migracions y la Generalitat es fruto del proyecto "Una aproximación holística e interdisciplinar a los matrimonios forzados en Cataluña: diagnosis y propuestas de intervención comunitaria para una ciudadanía inclusiva", coordinados por Sònia Parella (UAB) y David Moya (UB), realizado con el apoyo del Programa Recercaixa (ACUP-Obra Social laCaixa).