Carlos Alfonso y Santiago González debaten sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones
19/09/2018
La sala de grados de la Escuela de Postgrado acogió, el pasado 19 de septiembre, el VIII Diálogo por el Conocimiento UAB-Sociedad, que contó con las intervenciones de Carlos Alfonso Mellado y Santiago González Ortega, catedráticos de derecho del trabajo y de la seguridad social de, respectivamente, la Universidad de Valencia (UV) y la Universidad Pablo de Olavide (UPO).
La sesión, que llevaba por título "¿Es sostenible el sistema de pensiones?", se vertebró en cuatro ejes temáticos: la importancia del sistema de pensiones, las cuestiones nacionales e internacionales, las consecuencias de tener un sistema público, privado o mixto y, por último, la sostenibilidad.
Carlos Alfonso comenzó su intervención hablando del papel clave del sistema de protección social en la estabilidad europea y afirmó que "se está viviendo un cambio de paradigma" donde el "núcleo esencial de la sociedad será el pensionista". Santiago González destacó que los sistemas de protección social tienen una "función utilitaria" porque "atenúan conflictos". González también reflexionó sobre el sistema norteamericano, en el que "reina la lógica individualista", para contraponerlo con el español, basado "en el valor de la solidaridad".
En cuanto al segundo eje, Alfonso afirmó que los tratados internacionales reconocían el "derecho a la seguridad social" porque "la protección social fue el gran cambio en los estados europeos tras la II Guerra Mundial". González añadió, también, la protección social que establecía el artículo 41 de la Constitución española.
Para abordar el tercer eje, las diferencias entre el sistema público, privado o mixto, Carlos Alfonso puso como ejemplo dos documentales –sobre la llegada de Donald Trump al poder y la caída de Lehman Brothers– y una película –'Mejor, imposible'– que mostraban las "consecuencias sociales de desmontar el sistema público". González apuntó, además, que un sistema privado "es selectivo" y que "tratar riesgos sociales con criterios de competitividad" tendría "consecuencias negativas, donde muchas personas quedarían fuera del sistema".
Finalmente, ambos ponentes se mostraron de acuerdo en la defensa de la sostenibilidad del sistema de pensiones. Por un lado, Carlos Alfonso afirmó que "con los datos oficiales en la mano" no veía quiebra por ninguna parte porque "hay que tener en cuenta el gasto que suponen las prestaciones sociales en relación con el PIB". Por otro lado, Santiago González cerró el diálogo haciendo patente que el debate no era "si el sistema se puede sostener, sino cómo lo pagamos" y terminó destacando la importancia de la "voluntad política".