El Hub b30 explora oportunidades de simbiosis industrial

13/06/2018

La simbiosis industrial consiste en identificar y materializar sinergias entre actividades industriales que minimizan elementos infrautilizados o residuales, logrando beneficios económicos y medioambientales.

Iván Martínez, vicegerente de Investigación de la UAB, dio la bienvenida a los asistentes y aprovechó para recordarles que, aunque el Hub nació de la necesidad de la Universidad de abrirse al entorno y ofrecerle sus capacidades de I+D+I, la voluntad es que sea una iniciativa abierta a la que todos puedan sumarse. En este sentido, Roser Salvat, coordinadora del Hub b30 en la UAB, destacó la importancia de haber podido reunir en una misma mesa todos los agentes del territorio. En concreto, 15 representantes de empresas, 15 de centros de investigación, siete de ayuntamientos, cinco de entidades y un miembro de una cooperativa.

Antes de iniciar el debate, se presentó un caso de éxito de transferencia tecnológica del ámbito de la gestión de recursos entre la empresa Distiller y el Centro Tecnológico BIO-GLS, que se materializó con la puesta en funcionamiento de una planta piloto de producción de biogás. La instalación produce biogás, a través de un proceso anaeróbico, que luego puede ser utilizado como fuente de energía en sustitución del gas.

En este proyecto, la participación del grupo TECNIO BIO-GLS fue clave porque asesoró a la empresa para poder obtener una ayuda Núcleo de I+D de ACCIÓN, la Agencia por la Competitividad de la Empresa. A raíz de este ejemplo, una de las conclusiones del brunch de innovación fue que el rigor científico que puede aportar la Universidad se convierta en un valor para ayudar a las empresas a obtener financiación de las administraciones. Sin embargo, Albert Puyuelo, responsable de Desarrollo de Negocio de Distiller, afirmó que "sin ayudas, la empresa hubiera puesto igualmente en funcionamiento la planta porque los proyectos deben ser viables por sí solos".

Saber adaptarte a los tempos y a la metodología requerida para obtener un fondo público fue, según Puyuelo, una de las principales dificultades del proyecto. "Muchas veces la investigación parece cerrada dentro de la empresa, pero si pides una subvención, debes tener claro que tendrás que hacer difusión y transferencia de conocimiento", concluyó el responsable de Negocio de Distiller.

Otro de los aspectos en los que la UAB intervino en este caso de transferencia fue haciendo un estudio de viabilidad. En este sentido, para los asistentes al brunch, que los grupos de investigación puedan ofrecer estudios de viabilidad en la fase inicial de los proyectos, manteniendo la confidencialidad de las empresas, es una aportación interesante que puede ofrecer la Universidad al tejido empresarial.

Durante el debate, moderado por Eurecat, la demanda más repetida por parte de las empresas fue que haya una ventana única para dirigirse a las universidades, y que los centros y grupos de investigación sean capaces de cooperar para ofrecer soluciones en red a las empresas. En el caso de la UAB, el vicegerente de Investigación remarcó que debe ser el Parc de Recerca y el Hub b30 quienes hagan de "ventana única".

Como principal ventaja en el campo de la simbiosis industrial, los participantes destacaron la creciente demanda, por parte de los consumidores, de productos que hagan una gestión responsable de los recursos y sean respetuosos con el medio ambiente. Como dificultades, barreras económicas y legales, y lo difícil que es encontrar quién pueda asumir un residuo cuando ya se ha convertido en recurso; lo que obligará a potenciar el concepto de bolsa de subproductos.

Esta actividad ha contado con el apoyo de la Secretaría de Universidades e Investigación del Departamento de Empresa y Conocimiento de la Generalitat de Catalunya y la cofinanciación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).

Más información: Informe de vigilancia tecnológica de Gestión inteligente de residuos: simbiosis industrial