Más de 300 alumnos de primaria y de ESO «investigan» en los Campus de Arqueología de la UAB
Nueve centros de educación primaria y dos de secundaria de municipios del Pirineo y el Prepirineo participan este año en el programa Investiga.edu y en el Campus Joven de Arqueología de verano, que coordinan el CEPARQ, el Departamento de Prehistoria y la CORE de Patrimonio de la Universidad. La iniciativa pretende despertar el interés por la investigación arqueológica y el patrimonio del territorio entre los jóvenes y los niños de zonas rurales y está financiada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT).
En el programa, que celebra este curso la tercera edición, colaboran también el Geoparc Orígens, el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici y el Parque Natural del Montsant.
Los campus de arqueología implicados son el Campus de Arqueología y Paleontología de Coll de Nargó, con los yacimientos de la Señora de las Montañas (Montanissell, Alt Urgell), el Mirador del Cretáceo (Alt Urgell) y las Icnitas de la Massana (La Noguera); el Campus de La Noguera, con el yacimiento paleolítico de la Roca dels Bous, el del Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, con los yacimientos de la Cueva del Sardo (Boí, Alta Ribagorça) y el Abrigo de las Obagues de Ratera (Espot, Pallars Sobirà) del mesolítico y neolítico, y el Campus de Arqueología del Castellot (Bolvir, Cerdaña), del periodo íbero-romano. Este curso también se ha sumado el yacimiento de las Coves del Fem (Ulldemolins, Priorat), del periodo neolítico, situado en el Parque Natural del Montsant.
En total son nueve escuelas de infantil y primaria, con un total de más de 200 alumnos, y dos centros de secundaria, con un total de 100 alumnos. «Teniendo en cuenta la poca densidad demográfica de las zonas rurales y la poca divulgación científica que hay más allá de las grandes ciudades, se puede considerar que el programa es todo un éxito», señala Paloma González Marcén, profesora del Departamento de Prehistoria de la UAB e investigadora principal del proyecto.
El proyecto de investigación que el alumnado trabaja desde las aulas consiste en tres fases: la inicial, en la que se hacen preguntas sobre el propio yacimiento a partir de réplicas de restos arqueológicos o imágenes de este; la segunda, en la que se organizan talleres de diferentes disciplinas científicas para dar respuesta a las preguntas, y la tercera fase, en la que el centro educativo decide cómo difundir los resultados de su investigación.
«Algunas de las escuelas que participan desde el inicio en este programa han notado que el interés de los niños por aprender y descubrir el pasado de su territorio va en aumento y encuentran interesante acercar la ciencia a los más pequeños de la escuela», explica Anna Bonet, arqueóloga y coordinadora técnica del proyecto.
Como novedad, este año los centros educativos harán intercambios en línea o presencialmente entre escuelas con proyectos similares para descubrir qué investigan las otras escuelas rurales y qué restos arqueológicos hay en las zonas del Alto Pirineo y el Prepirineo.
El programa finalizará el mes de junio con el curso Campus Joven de Arqueología, para alumnado de secundaria de todo el país, que se enmarca dentro del programa Argón del Instituto de Ciencias de la Educación (ICE). La iniciativa permitirá investigar durante una semana el pasado a través del material de los laboratorios de arqueología ubicados en el campus central de la UAB.