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Universitat Autònoma de Barcelona

Confirman la presencia plena del Neolítico en el Pirineo

29 jun 2022
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La campaña arqueológica de este año en la Cueva de Coro Trasito (Huesca), que lleva a cabo el Grupo de Arqueología de la Alta Montaña de la UAB y el CSIC, confirma la presencia de una agricultura consolidada de trigo y cebada en zonas elevadas del Pirineo en las primeras etapas del Neolítico junto con una ganadería diversificada.

Arqueòlegs treballen en la campanya d'enguany de la Cova de Coro Trasito

Coro Trasito está considerada la cueva redil excavada a mayor altitud de la Península Ibérica (a 1548 metros). La excavación de 2022 que ha concluido esta semana ha permitido confirmar los indicios de una agricultura consolidada de cereales (trigo y cebada) durante el Neolítico antiguo (entre 5300 y 4450 años antes de nuestra era). Los trabajos realizados han proporcionado nuevamente abundantes restos de cereales. Esta evidencia, junto con la presencia de herramientas vinculadas al procesamiento de cereales (dientes de hoz y molinos), y polen de cereal en numerosas capas del yacimiento, consolida la imagen innovadora de la presencia de una agricultura en zonas elevadas del Pirineo en las primeras etapas del Neolítico. Esta información modifica la imagen tradicional del poblamiento de las zonas de montaña de la Península y, especialmente, del Pirineo durante el Neolítico. Según esta noción, el poblamiento humano del Pirineo al inicio del Neolítico habría sido residual y asociado al aprovechamiento estival de pastos de altura en una ganadería ovina. La evidencia arqueológica, en cambio, muestra otra situación: un asentamiento más estable, con agricultura, un ganado diversificado y una amplia gama de actividades asociadas.

Situada en el municipio de Tella-Sin, comarca de Sobrarbe, el yacimiento consiste en una cavidad de grandes dimensiones que alberga indicios de la estabulación de ganado a lo largo de diferentes épocas: moderna, la edad del Bronce (datadas entre 1430-1280 antes de nuestra era) y del Neolítico antiguo. El yacimiento es objeto de estudio desde el año 2011 bajo la dirección de los arqueólogos Javier Rey (Departamento de Educación Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón), Ignacio Clemente (Institució Milà i Fontanals – CSIC) y Ermengol Gassiot (Departamento de Prehistoria, UAB).

Los vestigios neolíticos

Los vestigios neolíticos son los que actualmente están centrando la atención de los arqueólogos. Consisten en los restos generados por la estabulación de ganado en el interior de la cueva durante el Neolítico antiguo, en una sucesión de estratos que cubre más de 1 metro de espesor. Junto a ellos se documentan también indicios de almacenamiento de alimentos en pequeños silos excavados en el suelo, así como fases en las que el espacio estudiado de la cueva fue un lugar de trabajo. La excavación a lo largo de 45 metros cuadrados está permitiendo su estudio detallado.

Los resultados tienen un alto valor científico. Por una parte, aportan información inédita sobre las primeras formas de ganadería en el alto Pirineo, que se fundamentaban en rebaños mixtos de ovicapridos, bóvidos y suidos. Este hecho contrasta con las formas ganaderas tradicionales imperantes a finales del s. XIX e inicios del s. XX, con cabañas esencialmente de ganado ovino. Otro aspecto relevante de la investigación es el amplio abanico de actividades que realizaron en el yacimiento sus pobladores durante el Neolítico: manufacturaron cerámica así como una amplia gama de herramientas líticas, de hueso y de madera; procesaron lácteos, además de carne del ganado consumieron alimentos procedentes de la caza, de la recolección de un amplio espectro de frutos y trabajaron minerales para elaborar pigmentos. Llama también la atención la amplia presencia de adornos, desde cuentas de collar y colgantes en conchas marinas hasta un brazalete de mármol, que confirma la relación del yacimiento con otras áreas geográficas del levante peninsular.

En la presente campaña de excavación se ha retomado el programa Excava con el Geoparque de Sobrarbe. Desde 2013, este programa promueve la participación semanal de dos personas voluntarias en las excavaciones de Coro Trasito como herramienta para la divulgación de la investigación en arqueología. También ha acogido alumnado en prácticas del grado de Arqueología de la UAB

Las investigaciones en Coro Trasito se realizan en el marco del proyecto de investigación «Las primeras comunidades agropastorales de la vertiente sur del Pirineo Central (5600-4500 calANE): economía y paisaje» (PID2020-115205GB-I00), financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y co-dirigido por Ermengol Gassiot e Ignacio Clemente y en el marco de sucesivas ediciones del proyecto «Arqueología del pastoralismo en el bien Pirineos- Monte Perdido (vertiente española)», financiado por el Ministerio de Cultura y la Comarca de Sobrarbe.

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Gassiot-Ballbè, Ermengol, Mazzucco, Niccolò, Díaz-Bonilla, Sara, Obea-Gómez, Laura, Rey-Lanaspa, Javier, Barba-Pérez, Marcos, Garcia-Casas, David, Rodríguez-Antón, David, Salvador-Baiges, Guillem, Majó-Ortín, Tona and Clemente-Conte, Ignacio. Mountains, Herds and Crops: Notes on New Evidence from the Early Neolithic in the Southern Central PyreneesOpen Archaeology, vol. 7, no. 1, 2021, pp. 1015-1034. https://doi.org/10.1515/opar-2020-0193

Gassiot-Ballbè, E. et al. (2021). Early Neolithic Farming Activities in High Mountain Landscapes of the Pyrenees: Simulating Changes in Settlement Patterns. In: Pardo-Gordó, S., Bergin, S. (eds) Simulating Transitions to Agriculture in Prehistory. Computational Social Sciences. Springer, Cham. https://doi.org/10.1007/978-3-030-83643-6_8

 

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