Expertos en seguridad y emergencias analizan el aumento de ahogamientos en las playas este verano
17/09/2019
La temporada de playas 2019, que abarca del 15 de junio al 15 de septiembre, ha finalizado con 28 bañistas muertos este verano, convirtiéndose con el peor de los últimos ocho años en el litoral catalán. Varios medios de comunicación se han hecho eco de este balance, y han buscado las opiniones de expertos que pudieran dar con la explicación.
Ramsés Martí, especialista en seguridad acuática y alumni de la Escuela, y Montse Font, Jefe del Servicio de Gestión de Emergencias y Protección Civil de la Generalitat de Cataluña, y profesora de la EPSI, han intervenido recientemente en una pieza informativa emitida por TV3 y en un artículo en el diario 'Ara' donde alertaban que la mitad de personas ahogadas eran mayores de 70 años, y sufrían alguna patología previa.
Según Font se trataban de ahogados silenciosos "porque tardaban en detectarse. Entraban en el agua para refrescarse, se desmayaban (por una patología) y quedaban boca abajo". Para los socorristas era difícil detectarles porque no mostraban ningún comportamiento de solicitar ayuda. Por este motivo, Martí determinaba que era necesario disponer de más socorristas en primera línea de playa, donde había más aglomeración de gente.
Ambos profesionales de la seguridad, contemplaban que debía realizarse campañas de concienciación, especialmente, a este colectivo de edad avanzada para ofrecerles recomendaciones con la finalidad de prevenirles del peligro de ahogamiento: como no bañarse en el mar si se encontraban mal, ni hacerlo en playas sin vigilancia, o que siempre fueran acompañados por alguien dentro del agua.
Por otro lado, el 32% de las muertes de este verano en las playas, se han producido en situaciones donde habían banderas amarillas y rojas, o en playas sin vigilancia con oleaje, un porcentaje superior que años anteriores. A pesar de que las ordenanzas municipales permiten multar a las personas que entran en el mar con bandera roja, los socorristas tienen que avisar a la policía, porque no "son autoridad" para poderlas sancionar.
Martí denuncia que la vigilancia "no es bastante efectiva" por las condiciones a menudo adversas en que tienen que trabajar los socorristas (muchas horas, torres y materiales de vigilancia obsoletos), precariedad laboral, etc. También, los efectivos se tienen que ir formando y reciclando, y "adaptándose a los cambios, porque las condiciones del mar son muy variables", añade en una entrevista concedida al programa de radio "Aquí con Josep Cuní" de SER Cataluña.
En este sentido, el alumni de la Escuela, lamenta que los municipios no dispongan de más recursos para poderlos destinar a más socorristas y vigilancia, y que la Ley de Costas delegue la responsabilidad de la seguridad de las playas a los ayuntamientos, sin que haya una normativa autonómica o supramunicipal que determine qué tiene que hacer cada ente local.