El turismo rural muestra su fortaleza durante la temporada de verano de 2020

Turisme Rural

El estudio "Informe: Turisme rural a Catalunya Estiu 2020", elaborado per el área de Investigación de la Escuela, constata que los establecimientos de turismo rural fueron los que menos notaron la caída de la actividad turística a causa de la pandemia.

15/12/2020

El reto del turismo rural es consolidarse como un referente de turismo sostenible, seguro y de proximidad y actuar como una auténtica herramienta de desarrollo local y territorial.

Los resultados de la investigación, realizada por los profesores Esteve Dot, Francesc Romagosa y Maria Noguera, llevan a determinar que la temporada de verano de 2020 fue positiva para el turismo rural en Cataluña, tanto si se consideran diferentes indicadores de fuentes estadísticas oficiales como los resultados obtenidos de la encuesta llevada a cabo dentro del estudio.

El análisis de las cifras de viajeros y pernoctaciones en diferentes tipologías de alojamiento ha permitido constatar como los establecimientos de turismo rural fueron los que notaron menos la caída de la actividad, en comparación, sobre todo, con los establecimientos hoteleros y los apartamentos turísticos, que experimentaron bajadas muy significativas durante los dos meses analizados, tanto para el conjunto de España como para Cataluña en particular. El caso de los campings se encuentra en una situación intermedia. Estos datos nos indican que la situación generada por la pandemia tendió a favorecer principalmente las modalidades de alojamiento turístico consideradas menos masificadas y/o más próximas a la naturaleza y, por lo tanto, aquellas que tienen una conexión más clara con aspectos asociados a la sostenibilidad y la seguridad (sanitaria).

 

El turismo de proximidad, menos masificado y más seguro

En relación a la modalidad de alojamiento de turismo rural, la demanda interna (de los residentes en Cataluña y España) creció de una forma destacada en relación al verano de 2019, con un 18,7% más de pernoctaciones, y compensó en parte la caída de las llegadas y las pernoctaciones de turistas extranjeros, que fue del 66%. Esta es la modalidad de alojamiento que más claramente se beneficia del incremento del llamado turismo de proximidad, hecho que denota que la demanda surgida del postconfinamiento valoró de manera más clara los destinos próximos y los alojamientos menos masificados y situados en entornos rurales y naturales.

La encuesta realizada a las personas responsables de la gestión de establecimientos de turismo rural en Cataluña también ha puesto de manifiesto que durante la temporada de verano de 2020 la preocupación de la demanda en materia de seguridad creció de forma evidente, mientras que también lo hizo, aunque de forma no tan marcada, la preocupación por aspectos relacionados con la sostenibilidad. La demanda habitual de este segmento del mercado turístico ya valora habitualmente en su decisión de compra del producto aspectos como la calidad del entorno, la autenticidad de la experiencia o la no masificación del destino.

 

Un sector con retos de futuro

El objetivo del estudio era analizar la situación de la oferta y la demanda de turismo rural en Cataluña durante el verano de 2020. La metodología se ha basado en la búsqueda documental y estadística y en la realización de una encuesta a gestores de establecimientos de turismo rural, en colaboración con las principales asociaciones del sector en Cataluña: TURALCAT, CONCATUR y Asociación de Turismo Rural Girona. La hipótesis de la investigación planteaba que al haberse incrementado de forma notable el turismo de proximidad con el desconfinamiento, los espacios rurales en general, y los establecimientos de turismo rural en particular, podrían ser unos de los principales beneficiados de este nuevo contexto.

El estudio ha puesto en evidencia que en la era post COVID-19 un turismo más próximo está ganando peso en muchos territorios y en particular en Cataluña, siendo el turismo rural una de las opciones más atractivas cuando hablamos de turismo de proximidad. Al mismo tiempo, el turismo rural es el que muestra tener una mayor capacidad de convertirse en un sector resiliente ante crisis repentinas e imprevistas, como la producida con la reciente pandemia.

Uno de los principales retos que tiene ante sí el turismo rural en nuestro país es, pues, la consolidación como un referente de turismo sostenible, seguro y de proximidad, manteniendo a la vez la calidad de sus productos y servicios, incrementando el grado de ocupación y disminuyendo la estacionalidad, y que actúe como una auténtica herramienta de desarrollo local y territorial.

Descargar el informe completo (en catalán)