Artículo sobre el control de la masificación turística en Barcelona

Article sobre el control de la massificació turística a Barcelona
Como uno de los expertos consultados en el artículo de Cerodosbe, Albert Saló opina sobre la instalación de tornos para el control de acceso en Venecia. El profesor e investigador afirma que faltan “mesas redondas con representantes académicos, vecinos y hoteles” para debatir antes de emprender medidas.

03/05/2018

El periodista Juan Pedro Chuet-Missé se pregunta, en un artículo reciente en Cerodosbe: “¿Y si Barcelona pusiera barreras para limitar el turismo?”. Ante la pregunta, distintos expertos y representantes de instituciones han dado su punto de vista sobre las barreras de control de acceso a los turistas de Venecia, medida que el Ayuntamiento empezó el primero de mayo.

Albert Saló, profesor y responsable de Investigación de la Escuela, ha explicado que, ante las características de una ciudad como Venecia –donde según el artículo el ratio es de 600 turistas por cada habitante-, la medida “no es mala idea para contrarrestar la presión turística, aunque a largo plazo repercute que los visitantes (y por no hablar de los residentes) sientan que se encuentran en medio de un parque temático”.

El experto continua exponiendo ejemplos parecidos aplicados a la Ciudad Condal, como el Parque Güell o el Poble Espanyol, pero que sería “imposible ponerlo en práctica” en las calles de Barcelona.

Saló también pone como ejemplo a pueblos con alta presió turística que podrían asumir prácticas parecidas, como sería Cadaqués, donde sería necesario hacer un estudio previo “para conocer el nombre exacto de visitantes”.

La solución pasa por la implicación de las partes

Aun así, el profesor e investigador de l’Escola ha sentenciado que una medida del consistorio de esta naturaleza tiene que hablarse con todos los agentes implicados: “antes de llegar a este tipo de soluciones, hecho en falta mesas redondas con representantes académicos, vecinos, hoteles y debatir qué tipo de ciudad se quiere”.

Finalmente, como solución para Barcelona, el artúculo expone diferentes propuestas de expertos y entidades locales, como la Asamblea de Barrios. Albert Saló, por su parte, ha destacado que una limitación de los apartamentos turísticos y un control del flujo turístico a través de la oferta “sería más fácil de gestionar”.