La UAB da continuidad al servicio de guardería con un convenio con La Llar d'en Pitus de Bellaterra
13/04/2015
Este acuerdo recoge condiciones específicas para el personal de la UAB, de la FUAB y de la esfera UAB, y posibilita la construcción del proyecto educativo de guardería realizado conjuntamente con la Facultad de Ciencias de la Educación, que incluye las prácticas de sus estudiantes en La Llar d’en Pitus.
El convenio aprobado por el Consejo de Gobierno recoge que la guardería La Llar d’en Pitus ofrecerá condiciones especiales y prioritarias a los colectivos de la UAB y de la Esfera UAB: unas cuotas iguales a las que están pagando actualmente las familias, servicios de acogida de mañana y tarde -dos horas gratuitas de 8 a 9 y de 17 a 18 horas-, además de formación bilingüe catalán-inglés, con maestros nativos de habla inglesa.
El equipo de maestros provenientes de la Escola Bressol Gespa se incorporará a La Llar d’en Pitus, de acuerdo con las necesidades derivadas de la matrícula del curso 2015-2016 y según recoge el convenio, o bien a la Fundación UAB.
La UAB, mediante la Facultad de Ciencias de la Educación, contribuirá al desarrollo del proyecto educativo de la Escuela Infantil La Llar d’en Pitus como escuela catalana abierta al plurilingüismo, laica y vinculada al entorno natural, social y cultural; con un proyecto pedagógico integrador e inclusivo que persiga el desarrollo integral de los niños partiendo de su individualidad, respetando sus ritmos y favoreciendo su autonomía y sus potencialidades, a través de la estima y la colaboración y el trabajo con las familias. El trabajo conjunto con la Facultad de Ciencias de la Educación favorecerá la incorporación de corrientes educativos innovadores y la formación permanente del equipo de maestros de la guardería.
El equipo de gobierno de la UAB, que ha llevado esta propuesta al Consejo, ha estado trabajando durante mucho tiempo en poder dar una solución de continuidad en el servicio de guardería para la comunidad, en un momento de fuertes recortes presupuestarios y de gran ahogo económico, que han forzado a la institución a priorizar los intereses derivados de las funciones que son propias y esenciales de la actividad universitaria, como son la docencia y la investigación, y que afectan 6.000 trabajadores y 40.000 estudiantes.