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Universitat Autònoma de Barcelona
Institut de Ciència i Tecnologia Ambientals (ICTA-UAB)

El ICTA-UAB participa en la presentación del 1er Informe de evaluación del cambio climático en el Mediterráneo

05 feb 2021
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La investigadora del ICTA-UAB Patrizia Ziveri participó en la presentación del 1er Informe de evaluación científica sobre el cambio climático y medioambiental en el Mediterráneo (MAR1) del (MedECC) en el que ha colaborado.

MAR1 MedECC

La presentación fue a cargo de Hugo Morán, secretario de Estado de Medio Ambiente al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y Arnau Queralt, director del Consejo Asesor para el Desarrollo Sostenible de la Generalidad de Cataluña.

El 1.er Informe de evaluación científica sobre el cambio climático y medioambiental en el Mediterráneo (MAR1), reúne los conocimientos científicos disponibles sobre el cambio climático, así como los riesgos asociados a la cuenca mediterránea, dirigido a los responsables políticos, las partes interesadas y los ciudadanos. El estudio, que incluye un resumen dirigido específicamente a responsables políticos con mensajes clave para cada ámbito ha sido elaborado por el Grupo de Expertos del Mediterráneo sobre Cambio Climático y Ambiental (MedECC), una plataforma científica independiente formada por 187 investigadores de veinticinco países. Entre estos expertos se encuentra la profesora de investigación ICREA en el ICTA-UAB Patrizia Ziveri.

Los expertos analizan los factores de cambio de origen climático, y concluyen que la cuenca Mediterránea se está calentando un 20 % más rápido que la media global y que en 2040 la temperatura media en el Mediterráneo subirá 2,2 ºC por encima de la temperatura preindustrial y 0,7ºC por encima de lo acordado en el Tratado de París. En consecuencia, por cada grado de calentamiento, la lluvia disminuirá un 4 %. En cuanto al nivel del mar, podría subir más de 90 cm en 2100.

Entre los factores de cambio no climáticos que se analizan en el informe, están el aumento de la polución del aire y del agua, la urbanización y la degradación de la tierra, y la reducción de las tierras de cultivo. Los expertos han calculado que en 2050 los campos de cereales disminuirán un 17 %. Otro de los efectos calculados para 2100 es que se duplicarán las zonas quemadas.

Respecto a las zonas costeras, el aumento del nivel del mar tendrá impacto en las infraestructuras, así como en la herencia cultural, y provocará la pérdida de terrenos agrícolas a causa de la salinización. Por otra parte, se estima que más de 180 millones de personas sufrirán escasez de agua.

El informe también analiza el aumento de la sobrepesca y la entrada de especies invasoras que amenazan la biodiversidad marina. El 90 % de las poblaciones de peces que se comercializan ya está sobreexplotado. El estudio estima que un 40 % de las especies endémicas de peces se extinguirá y que el 20 % de las especies marinas se perderá en 2050.

Estos cambios también tendrán efectos en la salud, que se verá afectada por el impacto de las olas de calor y la polución, con un aumento de enfermedades debidas a la transmisión por vectores o por la falta de alimentos. En general, los efectos de la polución se verán amplificados debido al aumento de temperatura.

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