Por qué no todos los supervivientes de cánceres infantiles son iguales
Existen numerosos trabajos que indican que los supervivientes de un tumor en el sistema nervioso central (SNC) son un colectivo en riesgo de padecer más secuelas y más graves, que los supervivientes de tumores no ubicados en esta zona. Esto es debido no sólo al tipo de tumor, sino a la localización del mismo y a los tratamientos necesarios para la supervivencia del paciente. Existe, por tanto, un cierto consenso acerca de la mayor afectación física y cognitiva de estos pacientes con respecto a otros, con otros diagnósticos oncológicos. Sin embargo, los resultados en cuanto a cómo estas secuelas y efectos secundarios tanto físicos como psicosociales afectan la calidad de vida en relación a la salud (CVRS) de estos supervivientes, son mucho más dispares y menos concluyentes.
En nuestro trabajo, se exploraron precisamente estos últimos aspectos. Se comparó la CVRS de un grupo de adolescentes de entre 12 y 20 años supervivientes a un tumor en el SNC con la CVRS de otro grupo de adolescentes supervivientes a diferentes diagnósticos oncológicos de ubicación distinta al SNC (por ejemplo leucemias, linfomas, tumores óseos, etc.). Además, se investigó la posible asociación de estos resultados con otros factores de tipo individual y médico, como son el género y el tiempo transcurrido desde el diagnóstico.
El primer hallazgo fue que los supervivientes de un tumor en el SNC presentaban peores puntuaciones en las dimensiones de CVRS de bienestar psicológico y apoyo social y relación con los iguales. Por otra parte, al explorar la posible interacción del tipo de tumor con el género del superviviente y el tiempo transcurrido desde el diagnóstico oncológico, no se observaron efectos diferenciales significativos entre grupos. No obstante, por sí sólo, el género sí se reveló como un factor de riesgo para la CVRS de estos adolescentes ya que las chicas supervivientes (tanto de un tumor SNC como no-SNC) eran las que peores puntuaciones manifestaban en las dimensiones de bienestar físico y autonomía de CVRS.
Por último, también el tiempo desde el diagnóstico oncológico se reveló como un claro factor de riesgo para la CVRS de estos jóvenes supervivientes, ya que cuánto más había trascurrido, peores puntuaciones se observaban en las dimensiones de CVRS de bienestar psicológico, apoyo social y relación con los iguales, relación familiar y vida en el hogar, y entorno escolar, tanto en los que sufrieron un tumor en el SNC como en los que sufrieron otro tipo de tumores.
A pesar de todo, cabe destacar que los promedios de las puntuaciones globales de CVRS se encontraban en torno al promedio poblacional de referencia (50±10), por lo que no podemos concluir que este grupo de adolescentes supervivientes a un cáncer (tanto SNC, como no-SNC) presentasen una CVRS especialmente deteriorada en comparación con la de adolescentes que no han padecido un cáncer, si bien al analizar en detalle, sí existían algunos casos cuyas puntuaciones individuales estaban claramente por debajo del promedio poblacional.
En resumen, los resultados obtenidos justifican el que se ponga especial cuidado a la hora de desarrollar intervenciones tanto durante el diagnóstico, como a medio-largo plazo a través de controles de seguimiento. Dado que no todos los cánceres afectan del mismo modo, se recomienda que estos controles, en la medida de lo posible, sean personalizados tanto durante el cáncer como cuando éste remita, para asegurar que la adaptación sea satisfactoria. Sólo de este modo podremos preservar y lograr que la CVRS no se vea perjudicada, como parece que sucede en algunos grupos de riesgo, como es el caso de los supervivientes de un tumor en el SNC, las chicas, y aquellos supervivientes que lleven más tiempo en periodo de remisión.
Carmina Castellano-Tejedor
Servicio de Oncología y Hematología Pediátrica, Hospital Universitario Vall d’Hebron
UAB
martcamp@copc.cat; ninacastej@yahoo.es
Referencias
Pérez-Campdepadrós, M.; Castellano-Tejedor, C.; Sábado-Álvarez, C.; Gros-Subías, L.; Capdevila, L.; Blasco-Blasco. Type of tumour, gender and time since diagnosis affect differently health-related quality of life in adolescent survivors. European Journal of Cancer Care. 2015, vol. 24, num. 3, p. 635-641. doi: 10.1111/ecc.12215.