Conocemos los ganadores de Elsa Moot Competition
Ellos son María José Freire, Anastasiya Harapuchyk, Ricardo Pol Hermida, Adrià Medina Altarriba y la Charlotte Vec, y cada integrante compone un puzzle multicultural muy enriquecedor: Argentina, Bielorrusia, Galicia, Cataluña y Alemania
24/05/2021
Un premio al trabajo bien hecho y a unas personas que han demostrado que la combinación de talento y esfuerzo solo puede dar como resultado éxitos
La universidad es una etapa tan sacrificada como gratificante. Terminar la época de exámenes, una birra al sol después de clase, una buena nota después de un semestre de esfuerzo constante...
Y a veces, las asignaturas no solo son créditos a superar, sino que se convierten en una fuente de conocimiento y experiencia.
Esto es lo que han vivido cinco estudiantes de la facultad:
María José Freire, Anastasiya Harapuchyk, Ricardo Pol Hermida, Adrià Medina Altarriba y Charlotte Vec.
Los cinco están en el último curso de Derecho, y han participado en la asignatura optativa de Simulación jurídica, impartida por Claudia Cristina Jiménez.
La profesora los animó a participar en el ELSA Barcelona-UPF Moot Court Competition, y la combinación de esfuerzo, talento y ganas los ha llevado a la victoria.
Desde el departamento de comunicación de la Facultad de Derecho, hemos tenido la oportunidad de conversar con los ganadores, conocer sus aspiraciones y las personas que se esconden detrás el premio.
Hemos descubierto un grupo multicultural: Cataluña, Galicia, Bielorrusia, Argentina y Alemania.
Adrià Medina, además de estar en el último curso de derecho, está estudiando simultáneamente relaciones internacionales, una carrera que nació mientras él ya estaba haciendo derecho. Es de Gurb, pero en tres meses, en septiembre, abandonará este pueblo de Osona para ir a Islandia.
Irá a hacer un Erasmus donde cursará asignaturas del máster en Derecho Polar. Una vertiente del derecho muy relacionado con el cambio climático. Él mismo nos lo ha explicado: "El hecho que se estén deshaciendo los polos, abre la posibilidad de nuevas rutas mercantiles, desde China, pasando por Rusia, que serían más cortas".
Una realidad, la del deshielo, conocida por todos, pero no su vertiente jurídica, donde también juegan un papel importante especializaciones como el derecho medioambiental, los derechos humanos o el derecho público.
Anastasiya Harapuchyk nació en Bielorrusia, pero pronto se instaló en Cataluña. El próximo curso seguirá a la UAB, puesto que le falta terminar el TFG, y seguirá vinculada al voluntariado, donde colabora con la Cruz Roja de Sabadell.
También tiene claro qué hará cuando termine la carrera: un máster de integración europea y relaciones internacionales, que la llevará de intercambio a Moscú. Un paso más adelante para lograr su sueño: ser fiscal a la corte penal internacional.
Ella y Adrià han sido las caras visibles de este Moot Court, pero dejan claro que es un trabajo en equipo, y que su tarea no hubiera sido posible sin todos los integrantes.
La tarea de researcher la ha desarrollado Ricardo. Ricardo es de Galicia, de Ferrol. Como Anastasiya, también le falta terminar el TFG, y participará con la FAS, concretamente en el programa de justicia del centro de Can Llupià, donde ya ha estado vinculado anteriormente y destaca "el trabajo importante que desarrollan".
La involucración de Ricardo con el asociacionismo no se limita a la FAS, y tambien colabora con la PAH, y asegura que le gustaría ayudar a la plataforma en su Galicia natal, donde "les falta colaboración jurídica" para hacer frente a la emergencia de la vivienda.
Ricardo lo tiene claro: prefiere la docencia y el activismo a la abogacía.
Tanto Adrià como Anastasiya y Ricardo están haciendo la mención en Derecho Internacional y Comunitario. Las otras dos ganadoras, María José y Charlotte, se encuentran de intercambio.
María José Freire viene de la Universidad de Buenos Aires y está especializándose en materia de derechos humanos y de género. Charlotte Vec está de intercambio con la Universidad de Frankfurt.
Sus caminos seguirán juntos por dos motivos.
El primero, al ser ganadores, participarán en un curso sobre derechos humanos a la delegación de la ONU en España.
El segundo, porque se han quedado con ganas de más competiciones, y participarán en el concurso que se celebrará en la corte penal internacional de la Haia.
Valorando el premio, Anastasiya ha asegurado que más que la ilusión de ganar, lo que se lleva es el equipo que han creado: "hemos trabajado super bién desde un principio, y ganar ha sido la guinda del pastel".
Adrià Medina ha remarcado el esfuerzo de todos, el trabajo en equipo, y los sacrificios que han tenido que hacer, sobre todo durante el mes de preparación, para poder salir adelante.
En definitiva, un premio al trabajo bien hecho y a unas personas que han demostrado que la combinación de talento y esfuerzo solo puede dar como resultado éxitos