La masía can Miró

El antiguo caserío está documentado por primera vez en el año 1293. Hasta mediados del siglo XX el edificio es el hogar y el centro de producción agrícola de tres linajes de familias campesinas: los Noguera, los Miró y los Llobet. Los Noguera se mantienen como poseedores del "mas" desde el siglo XIII hasta mediados del siglo XIV y los primeros Miró documentados son del año 1434, los cuales se mantienen como poseedores de la finca hasta el siglo XX, que por matrimonio pasa de los Miró a los Llobet.

Situado entre la Vall Moronta, la sierra de Puig Delmo y las torrenteras que bajan de la sierra de Galliners, la masía disfrutó de una situación privilegiada junto a las tierras de cultivo, las corrientes de agua y los bosques de la sierra. Trigo, espelta, bueyes, vacas, terneras y asnos constituyeron los productos económicos que cultivaron los primeros propietarios; más adelante se añadió un importante cultivo de viñedos.

Simultáneamente a la actividad campesina, el "mas" no ha sido ajeno a los hechos exteriores: las guerras, las epidemias y los cambios y transformaciones sociales. Varias guerras con Francia, entre los siglos XVI y XIX, dejaron su huella en el término. También los problemas con los soldados de Castilla y Francia, especialmente los alojamientos y los cortes impuestos, afectaron a la casa Miró. Las guerras de los Segadores y de Separación tuvieron incidencia en la región, especialmente porque los Marimon, señores del castillo, fueron destacados colaboracionistas de la autoridad real, opuestos a menudo a las instituciones políticas catalanas. Varios bosques de robles, como el de Can Miró, debieron ser talados como contribución para la construcción de galeras y barcos de guerra. Aunque con reticencias, como los otros agricultores del término, los Miró tuvieron que contribuir económicamente a la construcción de la nueva iglesia parroquial de Sant Martí de Cerdanyola.

Finalmente, la construcción de la Universitat Autònoma de Barcelona en 1971, sobre las tierras de la finca de can Miró, supuso la desaparición definitiva del "mas", quedando en pie el testimonio de la masía, especialmente la fachada principal orientada a oriente. Es en este edificio remodelado y ampliado donde se alojan actualmente la Escuela de Postgrado y la Escuela de Doctorado, la primera piedra de la cual fue colocada el 28 de octubre de 1997.

(Textos extraídos del libro del historiador cerdanyolense Miquel Sánchez i González: Història del mas Miró, abans dit Noguera. Inédito, 2001.)

(Fotos: Diversas escenas de la vida rural en la antigua finca can Miró, en los años 30 del siglo XX.)

Serie de fotografías de la vida rural en la antigua masía can Miró, en los años 30 del siglo XX: