La universidad ha de ser un punto de referencia del cambio social y político

04/12/2018

La candidatura B está formada por: Gerard Sala Mayench (presidencia), Nerea García Luque (secretaría), Albert Querol Egido (tesorería), Marc Caravaca Rodríguez, Jose Antonio Capitán Gutiérrez, Joan Jacob García Ochs, Sergio Bachiller Rubia (vicepresidencias).
 
1) ¿Por qué el Plenario debería votar vuestra candidatura?
 
Gerard: Nosotros nos presentamos para intentar dinamizar y hacer que el consejo de estudiantes se haga conocer. Entendemos que un consejo de estudiantes es una herramienta muy potente cuyo potencial ahora mismo no se está aprovechando por la carencia de conocimiento de los estudiantes. Por lo tanto, nuestra candidatura pretende aprovechar este año para darlo a conocer para que así consiga más poder y relevancia dentro de la Autónoma. De esta manera, los estudiantes podrán gozar los máximos derechos y capacidades posibles, a la vez que dinamizamos o ayudemos a dinamizar toda la universidad.  
 
2) Qué os distingue de otra candidatura?
 
G: Propuestas concretas. Entendemos que la Asamblea es una candidatura perfectamente válida y que siempre se presenta, y estamos muy agradecidos de que lo haga. Hace propuestas que son muy amplias de concepto pero bajas en concreción. De manera que tiene unos objetivos muy lógicos y válidos, pero no creemos que el consejo de estudiantes tenga suficientes recursos para llevarlos a cabo todos. Nosotros, en cambio, lo que hacemos es reducir la amplitud de estas propuestas para poder actuar en cada caso. Entonces, nuestra actuación es muy centrada y va muy dirigida; queremos conseguir resultados. Además, las huelgas las contemplamos como una herramienta más y de último recurso en lugar de ponerlas en primer plano, ya sean de índole general o estudiantil.
 
3) ¿Qué modelo de universidad defendéis?
 
G: Una universidad rica, plural, en convivencia y donde nadie tenga miedo de expresar su opinión. Es decir, que el miedo no lleve a la ignorancia.
 
4) ¿Cuáles creéis que son los problemas más graves a los que se enfrentan los estudiantes de la universidad pública?
 
G: Uno de los problemas más grandes es, lógicamente, la subida de tasas. Estas tasas del 30% son crueles, para decirlo de forma suave, para los estudiantes. Lo que sí entendemos es que este es el problema principal y más visible, pero hay una serie de problemas que no se ven y que también afectan, como por ejemplo la carencia de discusión sobre temas como la actualidad política. No puede ser que dentro de la universidad tengamos la formación S’ha acabat y Societat Civil Catalana, las formaciones de las asambleas y los órganos independentistas y, entre ellos, no haya ningún tipo de debate en toda la Autónoma; hay demasiados estudiantes que no están formando una opinión al respecto cuando creemos que la universidad ha de ser un punto de referencia del cambio social y político de la sociedad.
 
Los estudiantes tienen el poder de cambiar toda la sociedad y de evitar que la ultraderecha suba como acaba de pasar en Andalucía. Pero creemos que si no hay un debate propio, un debate sano, bien hecho, en la UAB, a cada una de las facultades, eso no se podrá llevar a cabo. Por eso nosotros decimos: “hacemos el debate”. Creemos que esto es un problema que está escondido y se ha de arreglar.
 
Nosotros, una propuesta interesante que añadimos dentro del programa electoral es que intentaremos organizar debates de índole electoral. Sabemos que viene un año duro electoralmente porque habrá elecciones municipales y europeas. No sabemos si habrá elecciones en el Estado Español o en el Parlament de Catalunya, aunque es probable.
 
Nosotros, dentro del programa, sí que presentamos la idea de organizar debates en la Autónoma de los candidatos a cada una de estas elecciones, para que todo el alumnado pueda tomar una decisión al respecto. De la misma manera, presentamos debates sobre aspectos clave que afectan directamente a los estudiantes, como el 3+2 o el Plan Bolonia, para saber qué preferiría hacer cada facultad sobre los preceptos de igualdad de precio de grado y máster y que ninguno de estos planes puedan contradecir la mayoría del alumnado. Por ejemplo, si planteamos un debate en la Facultad de Biociencias sobre el 3+2 y proponemos también hacerlo en otras facultades como la de Derecho: si Biociencias saliera a favor del 3+2 y Derecho en contra, nosotros daríamos soporte incondicional al 3+2 en Biociencias y en contra a Derecho, únicamente sobre el precepto de igualdad de precio entre grado y máster.
 
5) ¿Creéis que los estudiantes están suficientemente representados en la universidad?
 
G: Tienen muchos órganos de representación pero están mal aplicados todos ellos. Eso es lo que creemos desde la candidatura, y por ello queremos reforzar el Consejo de Estudiantes y darle más importante y poder. Son unos órganos establecidos y jerárquicamente estructurados de manera que cada facultad pueda organizarse y pueda ser representada de manera concreta. No obstante, la carencia de reconocimiento de estos órganos y la carencia de actividades que organizan hacen que no se les escuche lo suficiente y, por ende, la gente no participa. En consecuencia, no se les escucha lo suficiente. Nosotros queremos romper este círculo vicioso y que vaya en dirección contraria, es decir, que se les escuche y que la gente participe, y a la inversa. De esta manera creemos que se escuchará a los estudiantes, pero necesitamos girar la rueda. Si continuamos funcionando como hasta ahora, los órganos de representación estudiantil no serán efectivos.