La Facultat de Ciències Polítiques i de Sociologia homenajea a Jean Blondel (1929-2022)

23/01/2023

Es justo que -desde nuestra Facultad- hagamos memoria del profesor Jean Blondel, pocos días después de su muerte (Londres, 25 de diciembre de 2022). Blondel ha sido una figura muy influyente en la ciencia política europea durante la segunda mitad del siglo XX y activo todavía en los primeros años del XXI. Pienso que su importancia está suficientemente justificada por tres motivos que comento a continuación a petición de la Decana de nuestra Facultad: por su obra personal como académico, por su actividad institucional como “emprendedor” científico y -last but not least - por su apoyo a la ciencia política de nuestro país.

Cabe subrayar, en primer lugar, su labor académica personal. La formación de Blondel, nacido en la ciudad provenzal de Tolón (1929), se inicia en el Instituto de Estudios Políticos de París. Pero se desarrolla principalmente en Inglaterra. Se gradúa en Oxford, hace su cursus profesional en universidad británicas y ejerce finalmente como profesor de la Universidad de Essex durante veinte años (1964-1984), convirtiendo su departamento de ciencia política en uno de los más importantes de ese país . Hace estancias en diferentes centros de Estados Unidos. En 1986 es designado profesor de ciencia política del Instituto Universitario Europeo, en Fiesole (Florencia), que será su puesto de trabajo hasta su jubilación en 1994. A partir de este año continúa, sin embargo, la su actividad en la Universidad de Siena y colabora con otros centros universitarios de todo el mundo como investigador y docente.

La extensa obra publicada por Blondel -una treintena de libros- se sitúa principalmente en el terreno del comparatismo institucional. Se ha ocupado de los partidos políticos y gobiernos locales. Pero quisiera subrayar en particular la atención que dedicó al estudio de los Ejecutivos como institución ya su relación con los partidos que les apoyan. Lo resalto porque la ciencia política se ha ocupado mucho más de los parlamentos como titulares formales de la soberanía democrática que de los gobiernos en los que se sitúa desde hace décadas la acción política decisiva. Blondel es -en este aspecto- un innovador y, en cierto modo, un precursor de trabajos individuales y colectivos posteriores.

Su labor académica ha sido reconocida con la investidura como doctor honoris causa en media docena de universidades y con la concesión en 2000 del Premio Johan Skytte, considerado como el Nobel de la ciencia política y que otorga cada año un jurado internacional convocado por la universidad sueca de Uppsala.

La segunda faceta de Blondel es la de “emprendedor” científico. Blondel fue el impulsor principal y el organizador inicial del European Consortium for Political Research (ECPR). Convencido de la necesidad de potenciar la ciencia política que se hacía en diferentes países de Europa Occidental después de la Segunda Guerra Mundial, Blondel -junto con un grupo plurinacional de politólogos (Rokkan, Daalder, Wildenman, Westerstahl y Hurtig), puso en marcha en 1970 este consorcio universitario integrado por departamentos y facultades de toda Europa. Blondel es el primer director ejecutivo y motor principal de esa red durante sus 10 primeros años de existencia. La hará crecer progresivamente, con la oferta de actividades de investigación y de intercambio entre los científicos sociales europeos que se ocupan de la política. Con capacidad de integrar diferentes disciplinas académicas y con diversidad de orientaciones teóricas y metodológicas, el ECPR se ha convertido en un actor esencial del desarrollo del conocimiento científico sobre la política, ampliando con el tiempo el abanico de sus actividades y publicaciones.

En el trasfondo de la iniciativa estaba también la intención de competir con la hegemonía de EEUU en esta materia, hacer valer las aportaciones que se hacían desde Europa y reforzarlas mediante la cooperación transnacional. Se puede asegurar que estos objetivos se han alcanzado suficientemente satisfactoriamente. La ECPR celebró en 2020 su 50 aniversario. Los ocho socios iniciales de 1970 son actualmente casi 400. Hay que tener presente que en el momento de su creación no eran frecuentes ni fáciles los intercambios a escala continental: la ECPR representó una herramienta básica para fomentarlos, especialmente mediante sus Joint-Sesiones que permitían reunir grupos de discusión sobre temas específicos y constituían a menudo el punto de partida de proyectos de investigación y publicaciones colectivas. Por su parte, la Summer School celebrada cada año en la universidad de Essex y gestionada por la ECPR fue un instrumento de formación en métodos y técnicas de investigación que ha beneficiado a buena parte de los profesionales de la ciencia política. De forma directa o indirecta, Jean Blondel ha tenido un papel principal en el desarrollo a escala europea de la ciencia política, con su reconocida capacidad de institution-builder y de entusiasta promotor.

Finalmente, hay que recordar que esta influencia de Blondel se hizo sentir también de manera directa en nuestro país. Conocí a Jean Blondel cuando visitó Barcelona en 1977, para explicarnos la existencia de la ECPR y explorar la posibilidad de contar con la participación de nuestras universidades. Era criterio de Blondel y de la ECPR asegurar que las universidades adheridas contaran con plena garantía de libertad de cátedra y de investigación, sin sumisión a la censura de las autoridades políticas. Blondel quiso observar directamente el resultado de la "transición democrática" en España, antes de invitarnos a la adhesión. La UAB fue la primera universidad española en adherirse a la ECPR (1978), porque nuestra propuesta de hacerlo dirigida al Rectorado fue inmediatamente acogida y financiada. Estábamos convencidos de que nos ayudaría a legitimar nuestra disciplina y perfilar el proyecto de Facultad que estábamos preparando desde hacía años. La presencia de nuestra gente en las sucesivas Joint-Sesions de la ECPR facilitó poco después de que su edición de 1985 se celebrase en Barcelona, con un éxito muy notable “de público y crítica”, como se me recordaba todavía años después por muchos colegas extranjeros. Uno de los efectos de ese éxito colectivo -quizás no del todo desligado de la generosidad gastronómica y enológica de nuestras instituciones públicas del momento - fue mi elección como miembro del Comité Ejecutivo de la ECPR. Desde este Comité estimulé la adhesión al consorcio de más universidades y departamentos de nuestro país. En cuanto a la UAB, nos procuró contactos internacionales que irían consolidando al equipo de científicos sociales, responsable de poner en marcha la primera facultad de ciencias políticas y de sociología de Cataluña.

Durante aquellos años de participación activa en el Comité Ejecutivo de la ECPR, compartí largas horas de reunión y de sobremesa con Jean Blondel. Hombre enérgico y cordial, discutidor a la vez contundente y seductor, se expresaba con exuberancia, siempre en un perfecto inglés académico que conservaba la erra gutural de su francés nativo. Sabía combinar la elegancia aparentemente despreocupada de la americana de pana con corbatas de colores y dibujos espectaculares que podían hacerle pasar por algún arquitecto de vanguardia.

Después de aquellos años de contacto frecuente y cordial, nuestra relación directa se fue disolviendo en el tiempo, como suele ocurrir inexorablemente en muchas de nuestras relaciones académicas. Pero la grabación y la imagen del acto de homenaje que Jean Blondel recibió con ocasión de su 90 aniversario me han evocado su fuerte personalidad de homenot planiano que - con inteligencia práctica, potencia dialéctica y energía vital - se hacía notar con efectos constructivos en cualquier encuentro o iniciativa en la que participara. Es de justicia, pues, que la ciencia política europea lo recuerde y que lo hacemos también -por motivos más particulares- desde nuestra Facultad.

Josep M. Vallès (19/01/2022)